Hace tiempo que no escribo en este blog, pero la semana pasada me llamó una cliente que tiene a su padre en una silla de ruedas, vive en un segundo piso sin ascensor, y por supuesto se encuentra con la dificultad para bajarlo a la calle.
Me acerqué a su domicilio para valorar la situación y me encontré con la desesperación de una familia por no poder bajar a un familiar a la calle ni siquiera un momento, hablé con su mujer y me comentó que acudió a distintos organismos oficiales para solicitar ayuda para bajar a su marido, pero no se crean, no dinero, sino alguna persona que pudiera ayudarle a bajar a su esposa a la calle, y no encontró ninguna ayuda.
Y como me comentó ella, no quiere dinero para ella, lo que necesita es que le solucionen el problema que tiene y después de intentar varias soluciones, no pudimos bajarlo, ¿es tan difícil que la administración le ayude para que pueda salir a la calle?.
Estoy intentado buscar una solución pero la verdad es difícil, no estamos preparados para ese trabajo, haría falta tener aparatos preparados para poder bajarlo, pero claro les dicen que tienen que comprar una silla especial como las que tienen las ambulancias cuando se lo bajan para llevarlo al hospital. ¿Saben lo que cuesta una silla de esas características?.
Y mientras ¿cómo lleva la situación la familia? pues mal y desesperados.
Mientras tanto intentaremos encontrar una solución para poder bajar al paciente y que la familia pueda ver realizada la ilusión de pasearlo por la calle aunque sea unos días.
lunes, 12 de noviembre de 2007
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